jueves, 30 de abril de 2015

"LOS REVESES DE LA VIDA"

"Los reveses de la vida" a veces me pregunto ¿por qué y para qué sirven? Porque en mi caso siempre han sido para joderme más, para hacerme la vida más complicada, para demostrarme que no soy capaz ¡vaya mierda! (con perdón por las palabrotas pero no me caben otras) se disculpa Malena.

Malena siente dolor cuando llegan los reveses, siente muchísima rabia y demás está decir el llanto que le provoca esta impotencia. Luego cuando pasan los días piensa y reflexiona en ello, "Algo tiene que haber detrás de los reveses que me vienen como puñetazos en plena cara. Algo tienen que traer, un mensaje, algo,... no puede ser que se presenten así sin más sólo para causarme dolor."

Puff, duro lo que piensa Malena y sin duda alguna difícil de descubrir ese mensaje subliminal, algo que en esas circunstancias no podemos ver por más que lo intentemos. Un mensaje, una señal que pasa por debajo de los límites de nuestra percepción. ¿Quién no se ha sentido así alguna vez o varias?

Esto se desencadenó en Malena por una simple llamada telefónica hace dos días:
Llamada: ¡Buenos días Malena! ¿Cómo estás? ¿Sigues de baja?
Te llamo para decirte que necesitan una persona con discapacidad para trabajar en el quiosco del hospital y la necesitan ¡ya!
Malena: ¡Estoy de baja!
Llamada: sí pero a lo mejor lo podemos arreglar y tienes trabajo.

A Malena se le abrieron las puertas del cielo, el trabajo ideal, esto sí puedo hacerlo piensa. Pues tengo que pedir el alta entonces.
Llamada: ¡Sí, claro! Sería para comenzar hoy o mañana durante 3 meses.
Malena: ¿Cómo, tres meses? ¿Sólo por tres meses?
Llamada: Sí eso es.
Malena: (desalmada) lo siento pero no puedo pedir el alta sólo para trabajar 3 meses porque ¿qué hago luego? Lo siento pero no puedo aceptarlo.
Llamada: No pasa nada, sólo era para avisarte. Nos vemos, un saludo.

¿Qué les puedo decir? ya os lo imagináis seguramente, los lagrimones que caían de sus ojos mojaron su ropa mientras cocinaba.
Malena: ¡Mierda! ¡Mieeerda! ¡Joder, Joder! ¡Soy una Inútil! ¡Jodeeeeeeer! ¡No me puede estar pasando esto a mí! ¡Bastaaaaaaa!
En ese instante llega su mujer del trabajo Malena disimula sus lágrimas, pero no aguanta más y decide contarle lo sucedido, su mujer la escucha, luego la coge en sus brazos y Malena se desarmó, lloró hasta que se desahogó.
Durante la comida hablaron del tema, del por qué llamadas que llegan en momentos inoportunos, trabajos mejores que aparecen cuando ya tienes otro después de haber estado tantos años buscando y ni una sola llamada.
Las cosas son así parece ser.
Hablan mientras comen y Malena dice:
La oportunidad de trabajo que puedo hacer y ¿sólo por tres meses? y tengo que renunciar para seguir con la baja. Llorar, desesperar, ver las oportunidades en las narices y no poder cogerlas. ¿Por qué la vida te pone cosas frente a ti como un caramelo y luego te las quita antes de verlas con claridad?
No quiero que nadie me llame, ni me informen de nada porque sólo servirá para hacerme daño ¿por qué suceden esas cosas que no sirven para nada, solo para lastimarte? es muy doloroso y frustrante. Al final lo que consigues con la terapia psicológica y psiquiátrica se derrumba con una simple llamada telefónica comunicándote la oportunidad de comenzar un trabajo que se adapta a mis circunstancias. ¿Tiene sentido la llamada? ¿Por qué así como llegó se marchó, se esfumó dejándome un gran dolor en el pecho?
Muchas preguntas tiene Malena, pero su mujer le dice que ahora lo deje estar y disfrute de su baja que al fin, era trabajo sólo para tres meses.

La tormenta ha pasado para Malena pero desde aquel día sigue preguntándose ¿cuál es el sentido de estas cosas? Aún no encuentra la respuesta, no puede ver el mensaje oculto.

A su vez siguen pasando cosas, personas que aparecen y le dicen que aparecerá el trabajo que pueda hacer y que esté de acuerdo con su formación; este es el caso de Malena con la monitora de danza-terapia de la Asociación de Fibromialgia y Fatiga crónica,(una mujer muy mística para el gusto de Malena, ella diría ¡Un poco volada!).

La monitora le envía un mensaje al móvil diciéndole de hablar por teléfono:
Monitora: ¿cómo estás cariño?
Malena: perdóname, pero jodida.
Monitora: y eso, cuéntame cariño.
Malena: estoy desanimada, estoy con psiquiatra y me diagnosticó Trastorno adaptativo mixto (depresión - ansiedad) no tengo más ganas que de dormir y llorar.
Monitora: vamos a ver elaboremos el por qué de la depresión, cuándo comenzó , qué estabas haciendo, a qué te dedicabas.
Malena: (suelta todo el rollo,...)
Monitora: Mi niña, esos trabajos son incompatibles con tus problemas de salud, esta sociedad tan mal repartida te priva la posibilidad de transmitir todos tus conocimientos, con la formación que tú tienes cariño.
Malena: (escucha y asiente.)
Monitora: ¿me permites que te cante una canción que hice yo misma para los bebés que están en el vientre? (La monitora también es Matrona en un centro de salud).
Malena: ¡Claro que sí, quiero oírla! ( hubo un momento en que se tentó de risa pero la contuvo) pensaba para sus adentros ¿una canción me va a solucionar los problemas? más bien me va a terminar de dormir con lo dopada que ya estoy de tantas medicinas.
Monitora: ¿qué tal? ¿te ha gustado?
Malena: ¡es bonita y muy dulce! Gracias.
Monitora: cariño, en una semana podrás incorporarte al coro en el que canto.
Malena: ¡Gracias, muchas gracias!
Se despidieron.

¡Sí, ahí, dio en la tecla! ¡Sí, sí! para Malena la música es la puerta de escape, la música la hace sentirse realizada, libre.
Enseguida Malena recuerda haber estado chateando con una compañera de la carrera de música y que le decía: "Malena, tu pasión, tu vida es la música, recuerda como lo disfrutabas; si ahora tus manos no te permiten tocar los instrumentos, si las normas para enseñar en ese país no te lo permite no debes renunciar a la música. ¡Es tu vida Malena! Claro que puedes disfrutarla, siempre te quedará la voz ¿haz pensado en un coro?"

La Monitora ha dado en la clave para Malena, esto sí son mensajes subliminales claros y reales, estos no duelen, al contrario animan.

Pero Malena sigue en la búsqueda de significados en aquellos reveses de la vida que aparecen sin saber ¿por qué?
Vienen y se van sin más.






"LOS REVESES DE LA VIDA"

"Los reveses de la vida" a veces me pregunto ¿por qué y para qué sirven? Porque en mi caso siempre han sido para joderme más, para hacerme la vida más complicada, para demostrarme que no soy capaz ¡vaya mierda! (con perdón por las palabrotas pero no me caben otras) se disculpa Malena.

Malena siente dolor cuando llegan los reveses, siente muchísima rabia y demás está decir el llanto que le provoca esta impotencia. Luego cuando pasan los días piensa y reflexiona en ello, "Algo tiene que haber detrás de los reveses que me vienen como puñetazos en plena cara. Algo tienen que traer, un mensaje, algo,... no puede ser que se presenten así sin más sólo para causarme dolor."

Puff, duro lo que piensa Malena y sin duda alguna difícil de descubrir ese mensaje subliminal, algo que en esas circunstancias no podemos ver por más que lo intentemos. Un mensaje, una señal que pasa por debajo de los límites de nuestra percepción. ¿Quién no se ha sentido así alguna vez o varias?

Esto se desencadenó en Malena por una simple llamada telefónica hace dos días:
Llamada: ¡Buenos días Malena! ¿Cómo estás? ¿Sigues de baja?
Te llamo para decirte que necesitan una persona con discapacidad para trabajar en el quiosco del hospital y la necesitan ¡ya!
Malena: ¡Estoy de baja!
Llamada: sí pero a lo mejor lo podemos arreglar y tienes trabajo.

A Malena se le abrieron las puertas del cielo, el trabajo ideal, esto sí puedo hacerlo piensa. Pues tengo que pedir el alta entonces.
Llamada: ¡Sí, claro! Sería para comenzar hoy o mañana durante 3 meses.
Malena: ¿Cómo, tres meses? ¿Sólo por tres meses?
Llamada: Sí eso es.
Malena: (desalmada) lo siento pero no puedo pedir el alta sólo para trabajar 3 meses porque ¿qué hago luego? Lo siento pero no puedo aceptarlo.
Llamada: No pasa nada, sólo era para avisarte. Nos vemos, un saludo.

¿Qué les puedo decir? ya os lo imagináis seguramente, los lagrimones que caían de sus ojos mojaron su ropa mientras cocinaba.
Malena: ¡Mierda! ¡Mieeerda! ¡Joder, Joder! ¡Soy una Inútil! ¡Jodeeeeeeer! ¡No me puede estar pasando esto a mí! ¡Bastaaaaaaa!
En ese instante llega su mujer del trabajo Malena disimula sus lágrimas, pero no aguanta más y decide contarle lo sucedido, su mujer la escucha, luego la coge en sus brazos y Malena se desarmó, lloró hasta que se desahogó.
Durante la comida hablaron del tema, del por qué llamadas que llegan en momentos inoportunos, trabajos mejores que aparecen cuando ya tienes otro después de haber estado tantos años buscando y ni una sola llamada.
Las cosas son así parece ser.
Hablan mientras comen y Malena dice:
La oportunidad de trabajo que puedo hacer y ¿sólo por tres meses? y tengo que renunciar para seguir con la baja. Llorar, desesperar, ver las oportunidades en las narices y no poder cogerlas. ¿Por qué la vida te pone cosas frente a ti como un caramelo y luego te las quita antes de verlas con claridad?
No quiero que nadie me llame, ni me informen de nada porque sólo servirá para hacerme daño ¿por qué suceden esas cosas que no sirven para nada, solo para lastimarte? es muy doloroso y frustrante. Al final lo que consigues con la terapia psicológica y psiquiátrica se derrumba con una simple llamada telefónica comunicándote la oportunidad de comenzar un trabajo que se adapta a mis circunstancias. ¿Tiene sentido la llamada? ¿Por qué así como llegó se marchó, se esfumó dejándome un gran dolor en el pecho?
Muchas preguntas tiene Malena, pero su mujer le dice que ahora lo deje estar y disfrute de su baja que al fin, era trabajo sólo para tres meses.

La tormenta ha pasado para Malena pero desde aquel día sigue preguntándose ¿cuál es el sentido de estas cosas? Aún no encuentra la respuesta, no puede ver el mensaje oculto.

A su vez siguen pasando cosas, personas que aparecen y le dicen que aparecerá el trabajo que pueda hacer y que esté de acuerdo con su formación; este es el caso de Malena con la monitora de danza-terapia de la Asociación de Fibromialgia y Fatiga crónica,(una mujer muy mística para el gusto de Malena, ella diría ¡Un poco volada!).

La monitora le envía un mensaje al móvil diciéndole de hablar por teléfono:
Monitora: ¿cómo estás cariño?
Malena: perdóname, pero jodida.
Monitora: y eso, cuéntame cariño.
Malena: estoy desanimada, estoy con psiquiatra y me diagnosticó Trastorno adaptativo mixto (depresión - ansiedad) no tengo más ganas que de dormir y llorar.
Monitora: vamos a ver elaboremos el por qué de la depresión, cuándo comenzó , qué estabas haciendo, a qué te dedicabas.
Malena: (suelta todo el rollo,...)
Monitora: Mi niña, esos trabajos son incompatibles con tus problemas de salud, esta sociedad tan mal repartida te priva la posibilidad de transmitir todos tus conocimientos, con la formación que tú tienes cariño.
Malena: (escucha y asiente.)
Monitora: ¿me permites que te cante una canción que hice yo misma para los bebés que están en el vientre? (La monitora también es Matrona en un centro de salud).
Malena: ¡Claro que sí, quiero oírla! ( hubo un momento en que se tentó de risa pero la contuvo) pensaba para sus adentros ¿una canción me va a solucionar los problemas? más bien me va a terminar de dormir con lo dopada que ya estoy de tantas medicinas.
Monitora: ¿qué tal? ¿te ha gustado?
Malena: ¡es bonita y muy dulce! Gracias.
Monitora: cariño, en una semana podrás incorporarte al coro en el que canto.
Malena: ¡Gracias, muchas gracias!
Se despidieron.

¡Sí, ahí, dio en la tecla! ¡Sí, sí! para Malena la música es la puerta de escape, la música la hace sentirse realizada, libre.
Enseguida Malena recuerda haber estado chateando con una compañera de la carrera de música y que le decía: "Malena, tu pasión, tu vida es la música, recuerda como lo disfrutabas; si ahora tus manos no te permiten tocar los instrumentos, si las normas para enseñar en ese país no te lo permite no debes renunciar a la música. ¡Es tu vida Malena! Claro que puedes disfrutarla, siempre te quedará la voz ¿haz pensado en un coro?"

La Monitora ha dado en la clave para Malena, esto sí son mensajes subliminales claros y reales, estos no duelen, al contrario animan.

Pero Malena sigue en la búsqueda de significados en aquellos reveses de la vida que aparecen sin saber ¿por qué?
Vienen y se van sin más.