viernes, 5 de febrero de 2016

"SECUELAS DEL PASADO"

Abriendo más puertas.

¿Dónde estaban estas puertas que jamás las he visto e irrumpen de repente en mi vida?¿dónde?
Es ahora cuando Malena se pregunta si el pasado tiene sus consecuencias y de qué forma se está manifestando porque está claro que algo está cambiando, se siente frente a algo nuevo, íntimo, secreto pero que ha de ver la luz, "las secuelas del pasado".

Sientes como un apretón fuerte en el pecho, el corazón late fuerte y muy de prisa (cuenta Malena).
Te sientes invadida, como si te inflaran por dentro a tal punto que no puedes contener esa presión y sabes que explotará en algún momento.
Sientes dureza y sientes miedo pero te mantienes firme porque hay que hacerle frente y permanecer con los ojos bien abiertos.

Te sientes enamorada de la vida y te sientes perdida, a veces no todos los camino llevan a Roma o tal vez sí pero después de una ardua caminata, esas de las que llegas agotada, sin fuerzas, los brazos te pesan tanto como el alma, apenas entra una bocanada de aire para respirar e intentar reponerte un poco.
Levantas la mirada para ponerte en pié y ahí está, la puerta y tras ella la incertidumbre de no saber si serás capaz de hacer frente a las secuelas de pasado, por un lado quieres des encubrirlo, por otro te asusta y te sientes cansada para echar un vistazo a estas alturas de la vida.
Sabes que tras tanto sufrimiento en la infancia haya secuelas duras en el presente que te lleven a ser así como eres.

Malena teme introducirse y no cuenta más, sólo dice que tiene sueños y en ellos se ven reflejados los lados oscuros pero no alcanza a distinguirlos, tal vez no esté preparada aunque sabe que están ahí las secuelas del pasado. Ahí, tras la puerta.


"SECUELAS DEL PASADO"

Abriendo más puertas.

¿Dónde estaban estas puertas que jamás las he visto e irrumpen de repente en mi vida?¿dónde?
Es ahora cuando Malena se pregunta si el pasado tiene sus consecuencias y de qué forma se está manifestando porque está claro que algo está cambiando, se siente frente a algo nuevo, íntimo, secreto pero que ha de ver la luz, "las secuelas del pasado".

Sientes como un apretón fuerte en el pecho, el corazón late fuerte y muy de prisa (cuenta Malena).
Te sientes invadida, como si te inflaran por dentro a tal punto que no puedes contener esa presión y sabes que explotará en algún momento.
Sientes dureza y sientes miedo pero te mantienes firme porque hay que hacerle frente y permanecer con los ojos bien abiertos.

Te sientes enamorada de la vida y te sientes perdida, a veces no todos los camino llevan a Roma o tal vez sí pero después de una ardua caminata, esas de las que llegas agotada, sin fuerzas, los brazos te pesan tanto como el alma, apenas entra una bocanada de aire para respirar e intentar reponerte un poco.
Levantas la mirada para ponerte en pié y ahí está, la puerta y tras ella la incertidumbre de no saber si serás capaz de hacer frente a las secuelas de pasado, por un lado quieres des encubrirlo, por otro te asusta y te sientes cansada para echar un vistazo a estas alturas de la vida.
Sabes que tras tanto sufrimiento en la infancia haya secuelas duras en el presente que te lleven a ser así como eres.

Malena teme introducirse y no cuenta más, sólo dice que tiene sueños y en ellos se ven reflejados los lados oscuros pero no alcanza a distinguirlos, tal vez no esté preparada aunque sabe que están ahí las secuelas del pasado. Ahí, tras la puerta.