viernes, 22 de diciembre de 2017

"PELEONA, VALIENTE, FUERTE, LUCHADORA..."

Peleona, Valiente, Fuerte, Luchadora,... 
Todas y muchas más cualidades se dicen de Malena.
Pese al tiempo que llevo sin escribir sobre Malena, hoy he decidido con su permiso contar un poco sobre su salud y cómo la ven ante su propia enfermedad.

¿Denominación a la "ausencia" de ambos miembros superiores en una persona?

Wikipedia: 
"Este trastorno, clasificado en el grupo de las enfermedades raras, es producto de un defecto congénito que afecta la formación embrionaria."

¿Denominación a la "sensación de ausencia" de ambos miembros superiores en una persona?

Wikipedia:
"La parestesia se define como la sensación anormal de los sentidos o de la sensibilidad general que se traduce por una sensación de hormigueo, adormecimiento, acorchamiento, etc., producido por una patología en cualquier sector de las estructuras del sistema nervioso central o periférico"


                                                         SISTEMA NERVIOSO PERIFÉRICO                                                   



Causas: Muchas pueden ser. Una de ellas,.."Siringomielia" el diagnóstico dado a Malena.

Wikipedia:

"La siringomielia es un trastorno en el cual se forma un quiste dentro de la médula espinal. Este quiste se conoce como siringe o syrinx. Con el tiempo, el syrinx se expande y alarga, destruyendo el centro de la médula espinal. Puesto que la médula espinal conecta el cerebro con los nervios de las extremidades, este daño causa dolores, debilidad y rigidez en la espalda, los hombros, los brazos o las piernas. Otros síntomas pueden incluir dolores de cabeza (cefalea) y pérdida de la capacidad de sentir calor o frío extremos, especialmente en las manos. Cada paciente tiene una combinación distinta de síntomas."





No profundizaremos en la propia enfermedad, sino más bien, ahondaremos en las profundidades de Malena.


Malena, te observo cuando no puedes verme y te noto pensativa. Me pregunto ¿qué pasará por tu cabeza? ¿qué piensas? ¿qué sientes y cómo te sientes?

Te miro y pareces tranquila, serena. Pero no estás aquí, estás ausente, lejos.

...Me dices que tu interior está lleno de agua y te dejas mecer sobre ella sin mojarte, acostada sobre ese agua que se mece de lado a lado tan suave. 

Te gusta, me dices y no quieres salir de ese estado de calma y relax que te produce.
Estás contigo misma, disfrutando de ti, recostada sobre el agua calma que cubre todas las dolencias que llevas a cuesta.

El neurólogo te ha dicho que la situación de la lesión medular había cambiado; que está aumentando y de ahí las sensaciones que experimentas.


Me cuentas que tus brazos son como dos miembros tan pesados que cuelgan de tu cuello dejando contracturas por todo tu cuerpo.

Me cuentas que no sientes nada cuando tocas las cosas y lo que es más duro aún, me dices muchas veces que "no sientes tus brazos." 
He visto como tus brazos, Malena, no responden, se mueven sin control alguno, de forma involuntaria.
He visto tu cara de dolor, un dolor agudo que es difícil de soportar, pero estás ahí, conviviendo con todo ello día a día.

El neurólogo te ha comentado que puedes perder la movilidad tanto de los miembros superiores como los inferiores. ¿Duro Verdad? ¿Quién podría con ello?

Malena, tú has llorado, has salido de la consulta como asustada, ausente, con sentimientos contradictorios.
Subiste al autobús, te has sentado en una butaca individual junto a la ventana y no pudiste evitar las lágrimas para aliviar esa gran presión que estaba en tu garganta.
Nadie en el autobús te ha visto y menos llorar. ¡Lo normal des ser humano! Cada uno vamos a nuestro mundo, cerrados ante un móvil, una tablet, un mirar sin ver,..."
Llegaste a casa y lloraste algunos días.
Hoy estás mejor pero todo esto, no ha sido un sueño, no, no ha sido un sueño, esta vez ha sido una realidad que ha llegado y demasiado temprano quizá.

Si algo he aprendido frente a todo esto, junto a Malena, es la gran importancia de los afectos, esa necesidad desbocada de abrazos, risas, charlas, compartiendo la vida misma, fundirnos unos con otros para hacernos más fuertes, regalando un poco de mi fuerza al débil, en éste caso Malena.

Juntos somos más fuertes y nada ni nadie podrá quebrarnos.
Porque allí donde hay vida, florece la felicidad, vida compartida.
Vale la pena luchar por vivir.
Vale la pena caminar cada paso del camino que tenemos delante, porque es corto y deberíamos exprimirlo al máximo para "Vivir con alegría la Vida."



"PELEONA, VALIENTE, FUERTE, LUCHADORA..."

Peleona, Valiente, Fuerte, Luchadora,... 
Todas y muchas más cualidades se dicen de Malena.
Pese al tiempo que llevo sin escribir sobre Malena, hoy he decidido con su permiso contar un poco sobre su salud y cómo la ven ante su propia enfermedad.

¿Denominación a la "ausencia" de ambos miembros superiores en una persona?

Wikipedia: 
"Este trastorno, clasificado en el grupo de las enfermedades raras, es producto de un defecto congénito que afecta la formación embrionaria."

¿Denominación a la "sensación de ausencia" de ambos miembros superiores en una persona?

Wikipedia:
"La parestesia se define como la sensación anormal de los sentidos o de la sensibilidad general que se traduce por una sensación de hormigueo, adormecimiento, acorchamiento, etc., producido por una patología en cualquier sector de las estructuras del sistema nervioso central o periférico"


                                                         SISTEMA NERVIOSO PERIFÉRICO                                                   



Causas: Muchas pueden ser. Una de ellas,.."Siringomielia" el diagnóstico dado a Malena.

Wikipedia:

"La siringomielia es un trastorno en el cual se forma un quiste dentro de la médula espinal. Este quiste se conoce como siringe o syrinx. Con el tiempo, el syrinx se expande y alarga, destruyendo el centro de la médula espinal. Puesto que la médula espinal conecta el cerebro con los nervios de las extremidades, este daño causa dolores, debilidad y rigidez en la espalda, los hombros, los brazos o las piernas. Otros síntomas pueden incluir dolores de cabeza (cefalea) y pérdida de la capacidad de sentir calor o frío extremos, especialmente en las manos. Cada paciente tiene una combinación distinta de síntomas."





No profundizaremos en la propia enfermedad, sino más bien, ahondaremos en las profundidades de Malena.


Malena, te observo cuando no puedes verme y te noto pensativa. Me pregunto ¿qué pasará por tu cabeza? ¿qué piensas? ¿qué sientes y cómo te sientes?

Te miro y pareces tranquila, serena. Pero no estás aquí, estás ausente, lejos.

...Me dices que tu interior está lleno de agua y te dejas mecer sobre ella sin mojarte, acostada sobre ese agua que se mece de lado a lado tan suave. 

Te gusta, me dices y no quieres salir de ese estado de calma y relax que te produce.
Estás contigo misma, disfrutando de ti, recostada sobre el agua calma que cubre todas las dolencias que llevas a cuesta.

El neurólogo te ha dicho que la situación de la lesión medular había cambiado; que está aumentando y de ahí las sensaciones que experimentas.


Me cuentas que tus brazos son como dos miembros tan pesados que cuelgan de tu cuello dejando contracturas por todo tu cuerpo.

Me cuentas que no sientes nada cuando tocas las cosas y lo que es más duro aún, me dices muchas veces que "no sientes tus brazos." 
He visto como tus brazos, Malena, no responden, se mueven sin control alguno, de forma involuntaria.
He visto tu cara de dolor, un dolor agudo que es difícil de soportar, pero estás ahí, conviviendo con todo ello día a día.

El neurólogo te ha comentado que puedes perder la movilidad tanto de los miembros superiores como los inferiores. ¿Duro Verdad? ¿Quién podría con ello?

Malena, tú has llorado, has salido de la consulta como asustada, ausente, con sentimientos contradictorios.
Subiste al autobús, te has sentado en una butaca individual junto a la ventana y no pudiste evitar las lágrimas para aliviar esa gran presión que estaba en tu garganta.
Nadie en el autobús te ha visto y menos llorar. ¡Lo normal des ser humano! Cada uno vamos a nuestro mundo, cerrados ante un móvil, una tablet, un mirar sin ver,..."
Llegaste a casa y lloraste algunos días.
Hoy estás mejor pero todo esto, no ha sido un sueño, no, no ha sido un sueño, esta vez ha sido una realidad que ha llegado y demasiado temprano quizá.

Si algo he aprendido frente a todo esto, junto a Malena, es la gran importancia de los afectos, esa necesidad desbocada de abrazos, risas, charlas, compartiendo la vida misma, fundirnos unos con otros para hacernos más fuertes, regalando un poco de mi fuerza al débil, en éste caso Malena.

Juntos somos más fuertes y nada ni nadie podrá quebrarnos.
Porque allí donde hay vida, florece la felicidad, vida compartida.
Vale la pena luchar por vivir.
Vale la pena caminar cada paso del camino que tenemos delante, porque es corto y deberíamos exprimirlo al máximo para "Vivir con alegría la Vida."